España recauda menos que la media en los grandes tributos.

Los ingresos por IRPF, IVA y sociedades se sitúan por debajo del promedio europeo. En cambio, supera a la mayoría en impuestos sobre la propiedad y en sucesiones.

Las múltiples y continuas subidas fiscales aprobadas desde el inicio de la crisis no han impedido que España se mantenga como uno de los países con menos ingresos tributarios. En el IRPF, el IVA o el impuesto sobre sociedades, las tres grandes figuras impositivas que existen en todos los Estados la UE, España se encuentra por debajo de la media, según los últimos datos de Eurostat. En el IVA, cuyo tipo impositivo ha aumentado cinco puntos desde 2010, España es el tercer país que menos recauda.

En cambio, en los impuestos sobre propiedades y construcciones, la Hacienda española se encuentra en la media, algo que se explica por la importancia del IBI, el impuesto local que grava a los propietarios y que es el único tributo en España que jamás ha perdido recaudación. En los impuestos sobre transferencias de capital, que incluye el impuesto sobre sucesiones y donaciones, España ocupa la tercera posición, solo superado por Bélgica y Francia.


(Fuente Cinco Días)